¡Hola! Aquí estoy de nuevo dejándote mi artículo para cerrar el año...
Cada fin de año me tomo una pausa para respirar, reflexionar, entrar en contacto con mi mente, revisar mis pensamientos y hacer un balance de lo acontecido en este año que está por terminar.
¿Cuantos desafíos se presentaron?, ¿Que estuvo bajo mi control y que no?, ¿De cuales salí airosa? Lo que no salió como esperaba, lo que generó caos y me saco de mi zona de confort, lo que fue apacible y sencillamente maravilloso, las decisiones tomadas y las veces que me tocó dejar de remar y fluir con la corriente.
En este momento de reflexión, de introspección y conversación conmigo, con cada recuerdo no evito sentir un torbellino de emociones y sensaciones.
¿Que hice bien? ¿Que pude haber hecho mejor? ¿Qué resultados obtuve?
En este balance descubro que he tenido momentos felices, de calma, de diversión. He conocido y compartido con personas nuevas, unas más interesantes que otras, todas importantes, todas me han permitido descubrir una nueva forma de ver la vida.
También he vivido tormentas, superado adversidades, he contado con personas maravillosas a mi alrededor, he sentido la compasión, el miedo, el coraje, la esperanza, he aprendido que cada quien con sus acciones se labra su propio destino, que el azar puede ser maravilloso o cruel según se vea, que por mucho que lo desee no puedo interferir con el destino de otros porque este siempre se abrirá paso y que lo único constante es el cambio.
La idea de este ejercicio no es torturarme viviendo en el pasado, no puedo viajar en el tiempo y modificar lo que ya ocurrió, no puedo borrar mis errores o cambiar mis decisiones pasadas, el pasado esta fuera de nuestro alcance. De hecho, no quiero cambiarlo porque de ello aprendí, eso me hace la persona que soy ahora, creo y confío que soy una mejor persona de lo que era hace un año, por eso decido agradecer lo vivido y sacar lo mejor de mi para seguir adelante.
Si algo bueno tiene la vida es que siempre nos otorga otra oportunidad para comenzar de nuevo, para renacer de las cenizas como un Ave fénix, para seguir aprendiendo y creciendo hasta convertirnos en la persona que estamos destinados a ser.
La segunda Ley del karma o Ley de la creación, dice que "La vida requiere que participemos de ella", que debemos crear las opciones que queremos tener en nuestra vida.
Puede que hayas tenido un año muy duro o puede que hayas vivido el mejor año de tu vida, lo cierto es que, sin importar lo que haya sucedido, la vida seguirá ocurriendo, y está en nuestras propias manos la decisión de participar de ella, de seguir hacia adelante con ella aprovechando cada minuto, de bailar con ella, de fluir con ella... o declinar la invitación a vivir, permanecer quietos, mirando cómo la vida nos pasa por delante sin darnos la más mínima oportunidad de saborear las opciones que nos puede proveer.
Ahora a las puertas no solo de un nuevo año, sino de una nueva década, tenemos frente a nosotros 120 meses llenos de desafíos y oportunidades que nos esperan para obtener lo mejor de ellos y dar lo mejor de nosotros, tomemos la decisión de crear la vida que deseamos y nos merecemos.
Este es el momento para dejar atrás lo que no es bueno, lo que no funciona, lo que nos hace miserables y saca lo peor de nosotros. Hagamos limpieza en nuestro mundo interior y convirtámonos en una mejor versión de nosotros mismos.
Yo estoy dispuesta a dar la bienvenida a esta nueva década con felicidad, coraje y el compromiso de participar de la vida, de ser co-creadora de mi propio futuro y te invito a que tu hagas lo mismo.
Aceptemos el hecho de que no siempre podemos controlar las circunstancias de la vida, pero eso no nos impide vivirla plenamente ya que siempre podemos controlar como vamos a reaccionar ante ellas. Elegir sabiamente nuestras reacciones y actitudes ante esas circunstancias es la clave para vivir una vida feliz, plena y próspera.
La pregunta es, ¿Estás lo suficientemente comprometido como para convertirte en el arquitecto de tu propio destino? ¿Estás preparado para forjar la vida que deseas utilizando al máximo tus fortalezas y capacidades para aprovechar las oportunidades? O ¿Dejarás todo al azar aplicando la ley de “cómo vaya viniendo vamos viendo?
Tu destino depende de ti, recibe esta década con los brazos abiertos y no desperdicies una nueva oportunidad de construir la vida que deseas.
Ten presente que no basta solo con desear, soñar o tener esperanza, es necesario participar de la vida, muévete, sal y haz que tus sueños se conviertan en realidad. Que esta sea una década de esperanza y también de acción.
Toma el tiempo para despedirte de esta década que termina con el 2019, reflexiona sobre lo que fue excelente, bueno y lo no tan bueno. Deja ir lo que no te aporta nada, quédate con los aprendizajes y los buenos recuerdos y abre tus brazos a los desafíos y oportunidades de esta nueva década con pasión, coraje y compromiso.
Comienza este año decidiendo lo que realmente quieres, haz una lista con todas tus metas y sueños a corto mediano y largo plazo. Organiza tus capacidades, fortalezas y recursos, luego haz un plan, diseña tu estrategia para lograrlos, mide tus avances, enfócate en lo que está en tus manos controlar y evalúa los resultados. Ten mentalidad abierta, siempre deja espacio para los imprevistos y aprende a flexibilizar, de esta manera minimizarás el impacto de la incertidumbre.
No me queda más que agradecerte por haberme acompañado durante este 2019, espero que sigamos juntos en esta nueva década para ofrecer todo lo que estoy preparando para ti.
Mi obsequio de fin de año para ti es un planificador de metas que podrás descargar en el espacio recursos gratuitos. Te dejo el link al final de la página.
Además me encantaría conocer como te fue con el planeador, si tienes alguna duda o requieres ayuda. También te pido que me dejes sugerencias de temas que te gustaría ver en mi blog el próximo año.
¡Te deseo unas felices fiestas y el mejor de los éxitos para ti y tus seres queridos durante los días por venir!
¡Feliz 2020!
Por sobre todas las cosas hay algo de lo que puedo tener absoluta certeza... es que aquí y ahora ¡¡Estoy viva!!
La idea de este ejercicio no es torturarme viviendo en el pasado, no puedo viajar en el tiempo y modificar lo que ya ocurrió, no puedo borrar mis errores o cambiar mis decisiones pasadas, el pasado esta fuera de nuestro alcance. De hecho, no quiero cambiarlo porque de ello aprendí, eso me hace la persona que soy ahora, creo y confío que soy una mejor persona de lo que era hace un año, por eso decido agradecer lo vivido y sacar lo mejor de mi para seguir adelante.
Si algo bueno tiene la vida es que siempre nos otorga otra oportunidad para comenzar de nuevo, para renacer de las cenizas como un Ave fénix, para seguir aprendiendo y creciendo hasta convertirnos en la persona que estamos destinados a ser.
La segunda Ley del karma o Ley de la creación, dice que "La vida requiere que participemos de ella", que debemos crear las opciones que queremos tener en nuestra vida.
Puede que hayas tenido un año muy duro o puede que hayas vivido el mejor año de tu vida, lo cierto es que, sin importar lo que haya sucedido, la vida seguirá ocurriendo, y está en nuestras propias manos la decisión de participar de ella, de seguir hacia adelante con ella aprovechando cada minuto, de bailar con ella, de fluir con ella... o declinar la invitación a vivir, permanecer quietos, mirando cómo la vida nos pasa por delante sin darnos la más mínima oportunidad de saborear las opciones que nos puede proveer.
Ahora a las puertas no solo de un nuevo año, sino de una nueva década, tenemos frente a nosotros 120 meses llenos de desafíos y oportunidades que nos esperan para obtener lo mejor de ellos y dar lo mejor de nosotros, tomemos la decisión de crear la vida que deseamos y nos merecemos.
Este es el momento para dejar atrás lo que no es bueno, lo que no funciona, lo que nos hace miserables y saca lo peor de nosotros. Hagamos limpieza en nuestro mundo interior y convirtámonos en una mejor versión de nosotros mismos.
Yo estoy dispuesta a dar la bienvenida a esta nueva década con felicidad, coraje y el compromiso de participar de la vida, de ser co-creadora de mi propio futuro y te invito a que tu hagas lo mismo.
Aceptemos el hecho de que no siempre podemos controlar las circunstancias de la vida, pero eso no nos impide vivirla plenamente ya que siempre podemos controlar como vamos a reaccionar ante ellas. Elegir sabiamente nuestras reacciones y actitudes ante esas circunstancias es la clave para vivir una vida feliz, plena y próspera.
La pregunta es, ¿Estás lo suficientemente comprometido como para convertirte en el arquitecto de tu propio destino? ¿Estás preparado para forjar la vida que deseas utilizando al máximo tus fortalezas y capacidades para aprovechar las oportunidades? O ¿Dejarás todo al azar aplicando la ley de “cómo vaya viniendo vamos viendo?
Tu destino depende de ti, recibe esta década con los brazos abiertos y no desperdicies una nueva oportunidad de construir la vida que deseas.
Toma el tiempo para despedirte de esta década que termina con el 2019, reflexiona sobre lo que fue excelente, bueno y lo no tan bueno. Deja ir lo que no te aporta nada, quédate con los aprendizajes y los buenos recuerdos y abre tus brazos a los desafíos y oportunidades de esta nueva década con pasión, coraje y compromiso.
Comienza este año decidiendo lo que realmente quieres, haz una lista con todas tus metas y sueños a corto mediano y largo plazo. Organiza tus capacidades, fortalezas y recursos, luego haz un plan, diseña tu estrategia para lograrlos, mide tus avances, enfócate en lo que está en tus manos controlar y evalúa los resultados. Ten mentalidad abierta, siempre deja espacio para los imprevistos y aprende a flexibilizar, de esta manera minimizarás el impacto de la incertidumbre.
No me queda más que agradecerte por haberme acompañado durante este 2019, espero que sigamos juntos en esta nueva década para ofrecer todo lo que estoy preparando para ti.
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¡Te deseo unas felices fiestas y el mejor de los éxitos para ti y tus seres queridos durante los días por venir!
¡Feliz 2020!
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